LA OPOSICIÓN JUEGA CON FUEGO
La dirigencia opositora juega con fuego. Con el fuego que
encendió el sistema de poder que no soporta un gobierno democrático que no cede
a las presiones, condicionamientos y extorsiones con que acorralaron a los
gobiernos que se sucedieron desde que recuperamos la democracia.
No es casualidad que los mismos sectores que pergeñaron,
ejecutaron y recogieron “los beneficios” de la dictadura genocida cívica,
militar, mediática y eclesiástica, en una connivencia nacida de la conjunción
de intereses nacionales e internacionales sean los mismo que hoy atentan contra
la democracia.
En aquel momento “fue necesario” provocar la masacre de
una generación de militantes que soñaron otra realidad y la estaban
construyendo.
Hoy es este gobierno elegido por el pueblo, que es la
continuidad histórica de aquellos sueños haciéndose realidad, la víctima
elegida para volver al país para pocos.
La conjunción de
intereses “nacionales” e internacionales son las mismas en ambos momentos
históricos.
Es casi una réplica
por otros medios del cobarde bombardeo a la Plaza de Mayo previo al
derrocamiento de Juan Domingo Perón en 1955.
Este es otro gobierno
y la realidad también es diferente. Sólo es similar el intento de privar al
pueblo de gozar de los derechos que le corresponden.
La dirigencia
opositora juega con fuego. No se da cuenta que a quienes encendieron esa llama
no les importa que se inmolen. Porque llegado el momento cada uno de los que se
desviven por salir en las pantallas, páginas y micrófonos con que hoy los
seducen, mañana serán sólo cabos sueltos de una trama que cerrará con la cabeza
de esos dirigentes en la picota pública. Pero será tarde.
Porque el pueblo es
siempre el que paga el precio de la cobardía de los dirigentes.
Esta vez no pasarán.
Daniel Mojica
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